Entradas

Mostrando las entradas de febrero 3, 2019

El Apéndice del Diablo.

Imagen
                                                                                                                     El Apéndice del Diablo.         E l filo de una navaja oxidad en la garganta, me deja entregado. Una ventana abierta y ese descuido que produjo toda esta situación. No es extraño cuando te acostumbras a la tranquilidad y de repente, aquella inesperada presencia que me tenía en sus manos, mientras mi corazón se exaltaba ante lo que pudiera pasar. No sabía cómo decirle que no tenía dinero ni algo de valor en la casa, así que solo respondí con una interrogante: ¿Te has percatado lo que estás haciendo? Nunca salgas a robar sin antes verificar que al que robas tiene el dinero que buscas. El muchacho temblaba ante mi pregunta y mi tranquilidad lo puso más enfadado. Sentí como aquel filo se hincaba con mucho más fuerza, mientras me exigía que le diera todo lo que tuviera de valor. Muchacho, todo lo de valor que tengo son mis pelotas para decirte la verdad y que te largues